Este verano decidimos hacer un gran viaje en familia y que nuestros hijos viajasen por primera vez en avión.
Estuvimos debatiendo algunas ideas pero yo tenía muy metido en la cabeza que antes de que mis hijos se hiciesen más grandes quería ir a un parque de atracciones en Holanda ambientado en los cuentos tradicionales así que, finalmente, convencí a mi marido en marcar ese destino.
Reservamos vuelo, coche, estancia y a partir de ahí empecé a mirar que más cosas hacer en Holanda con los niños que son muchísimas.
Hay mil museos de todos los tipos (y muy caros todos) pero había unos cuantos que consideré que no nos podíamos perder. Así que os describo nuestra ruta por Holanda.
DÍA 1:
A las 7:30 de la mañana estábamos en el aeropuerto para empezar nuestro viaje. Llegamos a Holanda a las 11:30 y fuimos a buscar un coche de alquiler y a comer. A continuación pusimos rumbo a nuestra vivienda alquilada por
Airbnb cerca del pueblo de Putten. Una maravilla de casa bungalow con una anfitriona excelente que mimó todo tipo de detalle (botella de vino en la nevera, bombones en la entrada, muchas toallas, jabones de ducha, de fregar, de lavadora,...). Al llegar tuvimos que pagar 21€ de tasas de turismo por los 4.
Una vez ubicados fuimos a visitar la ciudad de Utrecht pero como ya eran las 5 de la tarde ya no se puede visitar nada que sea de pago. Dimos una vuelta andando por el pueblo y nos volvimos a Putten a hacer una pequeña ruta turística y a hacer la compra en un supermercado (en una especie de plaza estan juntos Lidl y Plus).
DÍA 2:
Mis hijos al saber donde íbamos de viaje cogieron su atlas para conocer cosas del país y una de las cosas que pidieron ver fue los quesos típicos. Así que en Gouda celebran su mercadillo los jueves y por eso destinamos el segundo día a visitar la ciudad. Pudimos ver su mercadillo de quesos y la representación de como se hacia la venta con sus choques de manos para llegar a los acuerdos del precio.
Dimos un paseo por sus calles y, antes de irnos, hicimos la parada de nuevo en el mercado para ver el pequeño reloj que 2 minutos después de la hora en punto y la media suena una música y salen unos muñecos de él.
Dudamos si parar en Delf que está muy cerca de Gouda, ya que es conocido por su cerámica azul que mis hijos también habían visto en su atlas, pero decidimos ir directos a La Haya porque queríamos visitar el museo Madurodam, que es un Holanda en miniatura.
Dentro hay una zona de parque infantil creada a partir de un antiguo barco de verdad y con un pequeño faro para que suban. Ya me gustaría a mi un parque así por Tarragona.
Quizás fue un error y deberíamos haber parado en Delf y podríamos haber comido por allí antes de ir a La Haya. Madurodam es tan grande que te dejan llevar tu propia comida y hay un restaurante dentro, pero yo con mis mil alergias y los panes con tantos tipos de semillas no lo acababa de tener claro así que comimos unos perritos calientes con patatas de la cafetería. Al ser un espacio tan grande destinado a turistas es uno de los pocos que cierra a las 8 de la tarde, por lo que a las 5 ya estábamos listos, por eso ahora pienso que podríamos haber parado tranquilamente en Delf. Y como nos sobraba tiempo lo que hicimos fue ir a ver la playa de La Haya (pero como no lo pensamos no íbamos preparados con bañadores y solo tocamos la arena).
La zona azul para la playa cuesta 4€ la hora. Dimos una vuelta por las calles con el coche y decidimos volver por camino de interior en lugar de autopista para ver si veíamos alguna granja de esas que he leído que hay tantas por Holanda que los niños pueden tocar los animales (aunque las que existen a las 5 seguro que cierran o ya no se puede ver nada), pero no tuvimos suerte en ninguno de los 6 días. Pero mis hijos, al no saber que existian, se conformaban mirando por la ventanilla del coche.
DÍA 3:
Al ser viernes el parque de atracciones que quería visitar cerraba a las 23h en lugar de las 20h así que decimos ir este día antes de estar más cansados del viaje. El parque se llama EFTELING. Tiene una parte de un bosque de cuentos con una especie de autómatas. Algunos se mueven o narran la historia del cuento en holandés.
|
La casa de Hansel y Gretel huele a chuches!! |
Y luego está el resto del parque con atracciones para todas las edades. Aunque para gusto de mi marido de las de adultos tiene pocas (acostumbrados a Port Aventura...).
|
Esta atracción te aguanta ahí arriba un par de segundos antes de dejarte caer |
Como esto me lo había requetemirado mucho antes de inciar el viaje llevaba ropa de recambio porque sabía que se podían mojar en las fuentes y en el laberinto (bueno de hecho, en muchos parques de Holanda se ve que hay fuentes para refrescarse, y eso que no saben lo que es nuestro calor!).
El parque tiene una super aplicación de móvil que te dice en todo momento por gps en que parte del parque estás, cuanta distancia tienes caminando a la atracción que quieres ir y cuantas colas tiene cada una (las más largas eran de 20 minutos), las horas de los espectáculos,... Incluso hay alguna atracción que reservas la hora.
Al poco de ir andando por las calles del parque ya encontramos la entrada del bosque de cuentos y decidimos empezar por ahí. ¡Error! Error porque al dar el sol de la mañana las fotos no quedan bien porque se ve el reflejo de todo lo que lo rodea (llamarme quisquillosa si queréis). Pero también porque al anochecer se encienden otras luces que lo hace más bonito. Y también estábamos todas las familias con niños allí metidos, creo, y hay algunos cuentos que no los vimos del todo bien. Y la verdad no es una zona para ver 2 veces porque puedes tardar bien bien casi 2 horas en verla. Así que yo haría primero las atracciones y después de comer un paseito por la zona de los cuentos y luego pues ya si quieres repites las atracciones que te queden o te gusten más.
Al acabar el día espectáculo de agua y música, que hacen en 3h diferentes.
Cosas que me gustaron de este parque:
- La zona de los cuentos es preciosa para los amantes de la literatura infantil (mis hijos de 6 y 9 ya no tenían tanta ilusión como yo... aunque les gustó).
- Las atracciones tiene una pequeña cola como las de las atracciones de Port Aventura con unos carteles que te indica que si hay gente hasta aquí son unos 15 minutos, más allá unos 25,... Pero también hay que decir que realmente se hacen como 2 tipos de colas. Está esa cola que ves en la parte exterior de la atracción pero al entrar es una especie de nueva cola que mientras te va llevando andando a la atracción en sí está todo cerrado y ambientado en la historia que tenga relación con esa atracción, algunas incluso con autómatas que hablan y se mueven,... y eso hace que las colas sean más amenas que no por ejemplo en Port Aventura que haces los 40 minutos caminando entre palos.
- Te puedes llevar toda la comida que quieras en una mochila. Nosotros nos llevamos unos bocadillos para comer y galletas para merendar y lo que si hicimos fue cenar allí. En teoría no se puede salir y entrar del parque, pero si es un momento al coche a buscar algo puedes. Nosotros por si acaso nos lo llevamos todo en la mochila todo el día.
DÍA 4:
Decidimos ir a visitar Amsterdam. Aparcamos en un P+R de la zona norte de la ciudad. Los P+R son unos aparcamientos que te cuestan 1€ todo el dia si aparcas a partir de las 10 de la mañana (para que los holandeses que van a trabajar no los usen) y tienen allí mismo una máquina para comprar el billete de transporte para ir y volver a la estación central de Amsterdam (el billete para 4 personas costaba unos 6€). Nosotros fuimos en tranvía y desde allí nos fuimos a visitar el museo Nemo que está muy cerca andando. El museo Nemo es un museo de la ciencia para los niños.
Al rato de llegar estaba a punto de empezar una demostración de reacción en cadena así que nos sentamos a verla.
|
Esto es solo una parte de la reacción en cadena. Sigue hacía la izquierda y también habían cosas que sucedían por encima de nuestras cabezas. |
Luego estuvimos explorando las diferentes plantas con sus exposiciones con elementos para interactuar sobre agua, energía, la mente, formas, ...
Hicimos un experimento en la zona de laboratorio. Nos apuntamos al de averiguar por qué la crema solar nos protege del sol.
En la terraza del museo hay bares para comer y también hay una parte de la exposición sobre energía que es de acceso gratuito desde la calle. En ella hay hasta fuentes de agua para que los niños se bañen.
Pero nosotros nos fuimos al museo naval que está al lado solo para poder entrar en el barco de la edad de oro que tienen anclado fuera. Hay que tener en cuenta que muchos de los museos cierran entre las 5 y las 6 de la tarde. Dentro del barco vimos una proyección en 3D que da hasta un poco de vértigo para vivir la época en que ese barco navegaba por los canales de Amsterdam.
Fuimos a caminar, o más bien intentarlo, por las calles de Amsterdam de la zona de la estación central y parar a comer algo porque ya pasaban de las 4 de la tarde. Al ser sábado por la tarde aquello era peor que la Puerta del Angel en Barcelona. Esa zona está cerca del barrio rojo así que había mucho olor a marihuana, mucho botellón en los canales, muchas despedidas de solter@ y casi no se podía andar por lo que decidimos volver nuestros pasos hacía atrás y volver a la zona del museo Nemo donde se encuentra la nueva biblioteca pública de Amsterdam y nos quedamos allí un rato al fresco y recorrimos con la escalera mecánica las 7 plantas. Leímos un cuento en la sección infantil y pusimos rumbo de nuevo a la estación central para coger el tranvía de vuelta al P+R.
DÍA 5:
Empezamos el día con rumbo a Leiden para ver un museo que se me había antojado que podía ser interesante de ver: CORPUS. En cada pase solo van 16 personas por lo que compramos las entradas reservando hora el día antes (porque el día anterior quise ir después de ver que no era cómodo pasear por las calles de Amsterdam y ya no quedaban entradas). No nos defraudó en absoluto. Todos los museos nos han costado una media de 60€ los 4 pero este realmente merecía la pena. Es un museo que te dan unas audio-guías en el español y vas haciendo el recorrido por dentro del cuerpo humano entrando por la rodilla donde una astilla se clava y te explican como los glóbulos van a curarla (todo desde dentro). De la rodilla subimos al riñón y a los intestinos. De ahí subimos al útero materno y explican como se forma un bebé. De ahí vamos subiendo al estómago, corazón, pulmones, boca, oído, nariz, ojos y acabamos en el cerebro. Una experiencia impresionante! Lástima que no te dejan hacer fotos. Los niños disfrutaron mucho pero mi hijo de 6 años decía que las explicaciones a veces eran demasiado rápidas para él.
Dimos una vuelta con el coche por el pueblo y pusimos rumbo de nuevo a Amsterdam pero esta vez aparcamos en el P+R del estadio olímpico, situado más al sur de la ciudad. Desde allí nos dirigimos al parque Volendam para hacer un picnic para comer y pasear.
Encontramos la "piscina" que hay para que los niños se refrescasen mientras hacíamos tiempo para ir al museo Van Gogh que teníamos la hora reservada para las 5 de la tarde (cierran a las 6). Todo y que va por reservas de horas hay mucha gente.
Después del museo nos dirigimos a la casa para dejar todo preparado porque al día siguiente era nuestro último día y por la mañana ya dejábamos la vivienda.
DÍA 6:
Después de asegurarnos que lo teníamos todo recogido y el corche cargado nos fuimos de ruta por el noroeste de Holanda. Nos fuimos a hacer un recorrido por algunos de los pueblos que hemos considerado de los más bonitos que hemos visto en Holanda.
Empezamos visitando Zaanse-Schans con sus molinos.
Para aparcar encontré
estas recomendaciones de una pareja que ha había ido el año anterior para poder aparcar, en el mismo recorrido más o menos que hicimos nosotros, de forma gratuita o más barata.
Los molinos se pueden visitar. El primero es una muestra de como era un molino de especias y tienda de souvenirs y es gratuito. Lo que gastas comprando lo destinan a mantener el molino. Los otros son de pago y funcionan pero como nosotros llevábamos el coche cargado con maleta no queríamos pasar tiempos demasiado largos así que entramos en el de la tienda para mirar souvenirs y dimos una vuelta por el precioso pueblo.
Luego nos dirigimos a Edam. En Edam los mercadillos de queso se hacen los martes. Al ser lunes la ciudad estaba la mar de tranquila y pudimos pasear por sus bonitas estrechas calles.
Comimos en un burguer king de carretera y pusimos rumbo a la isla de Marken. Se puede ir con el coche hasta la isla pero al llegar tienes que aparcar en el parking de pago porque no se puede circular con coche por dentro. A la entrada hay una pequeña "fabrica" de zuecos holandeses donde puedes comprarlos y otros souvenirs.
A ciertas horas hacen demostración pero cuando nosotros llegamos la acabans de acabar así que nos fuimos a pasear. Una ciudad muy bonita también, entramos incluso en el pequeño cementerio de la isla.
Desde allí pusimos rumbo a devolver el coche de alquiler y empezar de nuevo al aeropuerto para cenar allí antes de subir al avión. Saliendo de la isla paramos en una ladera para poder comprobar, una vez más porque ya nos pasó al acercarnos a la playa de La Haya, que para poder ver el nivel del mar tienes que subir la ladera porque la carretera queda más baja y así los niños podían entender por qué el país se llama Países Bajos.
Recomendaciones y valoraciones sobre Holanda:
Holanda no es un sitio para visitar ciudades en coche. Cuesta mucho circular por sus calles con las bicis, no hay muchos sitios donde poder parar ni 5 minutos para poder hacer una foto y todos los aparcamientos son muy caros, pero por eso tienen los P+R. Si solo visitas la ciudad de Amsterdam no sale a cuenta alquilar un coche, ya que tienes la tarjeta de I Amsterdam que tiene transporte público ilimitado y con ello te incluye las entradas de muchos de los museos. Nosotros no la compramos porque no nos salía rentable al estar solo un día y medio. Los museos que vimos no eran rápidos de ver y la mayoría cierran pronto por lo que no nos daba tiempo de visitar muchos por mucho que tuviéramos la entrada gratis. Al fin de cuentas nos salía más o menos por el mismo precio que comprando las entradas por internet y, de esa manera, si no me daba tiempo de ir a alguno era dinero que me ahorraba.
Si queréis visitar la casa de Anna Frank reservarlo por internet con meses de antelación. Yo lo miré un par de semanas antes de ir y ya no quedaban entradas en mes y medio.
A nosotros nos ha faltado un día en Amsterdam sin visitar museos para recorrer la ciudad con transporte público tranquilamente (y que no sea un sábado de julio) y poder ir al mercado de las flores, probar sus patatas fritas que me quedé con las ganas,... El hecho de que para ellos el final del día sea las 5-6 de la tarde hace que no podamos sacar provecho del día por mucho que te acuestes a las 22-23h.
Si quieres ir de ruta por las ciudades de Holanda desde cualquier vivienda de los pueblos que hay alrededor de Utrecht está casi todo a 1h en coche. El trayecto más largo que hicimos fue Putten-Efteling de 1h30 y la vuelta de La Haya-Putten sin autopista de 2h20, que no merece la pena porque todas las autopistas son gratuitas y los paisajes son prácticamente los mismos: vacas y más vacas y ovejas y caballos. Tulipanes en verano no ves ni uno. Si hacéis una ruta similar a la nuestra todas las ciudades quedan situadas a la izquierda de Utrecht así que quizás sería mejor alquilar la vivienda en un pueblo entre Amsterdam y Utrecht para acortar las distancias de trayectos, ya que lo único más lejano es Efteling al sur de Holanda. Aún así nosotros en los 6 días gastamos unos 110€ en gasolina.
Yo no se que tienen en ese país con las arañas pero están por todas partes. La decoración habitual de todos los puentes, paredes, rincones,... son telarañas y algunas con sus arañas (tan grandes que mis hijos decían que eran tarántulas), vayas a la ciudad que vayas.
El precio de la compra del supermercado puede suponer unos 20€ más que una compra de un carro en España, no es caro. La gasolina si que era unos 0'40€ más cara. Lo más caro de todo han sido los museos. En total hemos gastado 265€ en 5 museos. Lo que nos ha hecho gracia al pagar es que no quieren saber nada de los céntimos pequeños. Así que redondean los precios. A la baja te lo descuentan y a la alta te lo cobran. Así si algo vale 2'32€ te cobran 2'30 pero si cuesta 2'38€ te cobran 2'40.
Los pueblos que no son grandes ciudades viven en unas casas pequeñas que enamoran. No se ve casi gente por las calles, todo es tranquilo. Incluso en los supermercados no se escucha una alma, no hay hilo musical, la gente habla muy bajito,...Vamos, ¡igualito que aquí!
Un viaje que hemos disfrutado mucho, aunque nos ha faltado algún día para disfrutarlo más.